Aliadas en Cadena A.C. ha consolidado un modelo formativo que tiene como eje transversal la perspectiva de género y descansa sobre cuatro pilares fundamentales:
Derechos Humanos de las Mujeres
Un instrumento poderoso para superar las inequidades de género son los espacios de capacitación y fortalecimiento de conocimientos en materia de Derechos Humanos de las Mujeres, ya que facilita el empoderamiento de las mujeres, acortando las brechas de inequidad en el ámbito de las oportunidades. Sólo si las mujeres se apropian de sus Derechos Humanos, entendiéndolos como una forma de vida y no, únicamente, como un conjunto de normas y tratados, entonces serán capaces de promoverlos, exigirlos y defenderlos, en ejercicio pleno y activo de su ciudadanía.
Las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC´s)
Entendiendo que las TIC´s están impactando ineludiblemente gran parte de las actividades humanas, incidiendo en el desarrollo humano, un mejor y mayor acceso y uso de las tecnologías permitiría a las mujeres de sectores vulnerables adquirir herramientas para el desarrollo de competencias para el procesamiento de información, generación de conocimientos y creación de redes que beneficien a todas y todos y que puedan contribuir finalmente a superar la pobreza y exclusión.
Competencias para la Empleabilidad
Nuestro tercer pilar es el enfoque de competencias para la empleabilidad, el cual permite desarrollar acciones educativas que van dirigidas a apoyar a las mujeres para que se transformen en detectoras de oportunidades, pasando de ser pasivas a gestoras de sus estrategias de empleabilidad, a través del desarrollo de competencias claves. Entendemos la empleabilidad como la aptitud para encontrar, crear, conservar, enriquecer un trabajo y pasar de uno a otro obteniendo un cambio de satisfacción personal, económica, social y profesional.
Acompañamiento Psicosocial
El cuarto pilar del modelo de formación es el referido al Acompañamiento Psicosocial, donde la intervención va dirigida a las situaciones de exclusión y violencia de género, mediante estrategias que permitan el monitoreo constante del desarrollo de las participantes en los procesos de selección, capacitación, pasantías laborales y se extiende aún cuando las participantes egresan del programa. El proceso de acompañamiento implica la ejecución de estrategias de seguimiento y evaluación del desempeño de las usuarias, exploración de la situación familiar y las condiciones socioeconómicas en las que viven las participantes.